Edición 3
Cinco poemas de John Berryman
*A continuación presentamos las traducciones de cinco poemas del autor preparadas por Yanina Audisio (Argentina, 1983). Licenciada en Psicología y Magíster en Salud Pública. Escribe poesía y narrativa. Recientemente publicó el poemario La noche en los perros (Expreso Nova Ediciones, Buenos Aires, 2013). Realiza traducciones de poesía en lengua inglesa y corrige textos literarios. Colabora con diversas páginas y blogs de literatura. Coordina el grupo Las Puntas del Clavo en Buenos Aires. Su poemario La boca y su testigo, de próxima edición, ha sido premiado en el 7mo Concurso de Cuento y Poesía “Adolfo Bioy Casares”, organizado por la Municipalidad de Las Flores, Provincia de Buenos Aires.
Canción del sueño 14
La vida, amigos, es aburrida. No debemos decirlo.
Después de todo, el cielo destella, el inmenso mar suspira,
nosotros mismos destellamos y suspiramos,
y además mi madre me dijo cuando niño
(repetidamente) “Siempre confesar que estás aburrido
significa que no tienes
Recursos Internos.” Concluyo ahora que no tengo
recursos internos, porque estoy gravemente aburrido.
La gente me aburre,
la literatura me aburre, especialmente la gran literatura,
Henry me aburre, con sus problemas & quejas
tan mal como Aquiles,
que ama a la gente y el arte de vanguardia, que me aburre.
Y las colinas tranquilas, & la ginebra, parecen un lastre
y de algún modo un perro
se ha llevado a sí mismo & a su cola considerablemente lejos
dentro de las montañas o el mar o el cielo, dejando
atrás: a mí, el meneo.
***
Dream Song 14
Life, friends, is boring. We must not say so.
After all, the sky flashes, the great sea yearns,
we ourselves flash and yearn,
and moreover my mother told me as a boy
(repeatedly) ‘Ever to confess you’re bored
means you have no
Inner Resources.’ I conclude now I have no
inner resources, because I am heavy bored.
Peoples bore me,
literature bores me, especially great literature,
Henry bores me, with his plights & gripes
as bad as achilles,
who loves people and valiant art, which bores me.
And the tranquil hills, & gin, look like a drag
and somehow a dog
has taken itself & its tail considerably away
into mountains or sea or sky, leaving
behind: me, wag.
The Dream Songs (1969)
Canción del sueño 100
Cómo esta mujer logró el coraje, cómo tuvo
el coraje, Henry se aturdía en una frenética y cálida
noche de ocho de Julio,
de dónde vino, ¿acaso una vez el Señor frunció el ceño
sobre la cuna antigua pensando “Esta
va a hacer antes de morir
por dos y setenta años de humillaciones gastadas
al menos”, y con su trueno cerró una promesa?
En aquel pueblo distante
quién echó un vistazo sobre mi madre con tal pena & rabia
que nadie soportaría semejante peregrinación,
gruñó Henry sudando, crecido
pero no crecido en el hábito de la bondad de esta mujer
en su gran fuerza, en su esperanza sobrehumana,
no, no, no habituado en absoluto.
Proclamo un misterio, masculló para sí,
del amor, y tomó el whisky del anaquel
y la bebió en un largo trago, largo.
***
Dream Song 100
How this woman came by the courage, how she got
the courage, Henry bemused himself in a frantic hot
night of the eight of July,
where it came from, did once the Lord frown down
upon her ancient cradle thinking ‘This one
will do before she die
for two and seventy years of chipped indignities
at least,’ and with his thunder clapped a promise?
In that far away town
who looky upon my mother with shame & rage
that any should endure such pilgrimage,
growled Henry sweating, grown
but not grown used to the goodness of this woman
in her great strength, in her hope superhuman,
no, no, not used at all.
I declare a mystery, he mumbled to himself,
of love, and took the bourbon from the shelf
and drank her a tall one, tall.
The Dream Songs (1969)
El poema de la pelota
¿Qué es el niño ahora, que ha perdido su pelota,
¿Qué, qué va a hacer? La vi irse
Alegremente rebotando, calle abajo, y después
Alegremente por – ¡allí está en el agua!
De nada sirve decir “Oh, hay otras pelotas”:
Un último estremecimiento de pena fija al niño
Mientras se sostiene rígido, tembloroso, contemplando
Todos sus días de juventud en el puerto donde
Fue su pelota. Yo no lo molestaría,
Una moneda, otra pelota, no tiene valor. Ahora
Él siente la primera responsabilidad
En un mundo de posesiones. La gente se llevará pelotas,
Las pelotas se perderán siempre, pequeño niño,
Y nadie compra una pelota de vuelta. El dinero es externo.
Él está aprendiendo, bien detrás de sus ojos desesperados,
La epistemología de la pérdida, cómo estar de pie
Sabiendo lo que todo hombre debe un día saber
Y la mayoría sabe muchos días, cómo estar de pie
Y gradualmente la luz regresa a la calle
Suena un silbato, la pelota está fuera de vista,
Pronto una parte de mí explorará el profundo y oscuro
Fondo del puerto… Estoy en todas partes,
Sufro y me muevo, mi mente y mi corazón se mueven
Con todo eso que me mueve, bajo el agua
O silbando, no soy un niño pequeño.
***
The Ball Poem
What is the boy now, who has lost his ball,
What, what is he to do? I saw it go
Merrily bouncing, down the street, and then
Merrily over—there it is in the water!
No use to say ‘O there are other balls’:
An ultimate shaking grief fixes the boy
As he stands rigid, trembling, staring down
All his young days into the harbour where
His ball went. I would not intrude on him,
A dime, another ball, is worthless. Now
He senses first responsibility
In a world of possessions. People will take balls,
Balls will be lost always, little boy,
And no one buys a ball back. Money is external.
He is learning, well behind his desperate eyes,
The epistemology of loss, how to stand up
Knowing what every man must one day know
And most know many days, how to stand up
And gradually light returns to the street
A whistle blows, the ball is out of sight,
Soon part of me will explore the deep and dark
Floor of the harbour… I am everywhere,
I suffer and move, my mind and my heart move
With all that move me, under the water
Or whistling, I am not a little boy.
The Dispossessed (1948)
36
Mantén tus ojos abiertos cuando beses: hazlo, cuando
Beses. El resto del tonto tiempo, ciérralos para;
No dormir, te imploro (querida) sígueme
En la oscuridad, como lo hice contigo de nuevo
En seguida nos separamos… solo yo tanto entonces
Como cuando tus dedos caen, dejemos que haya dos
Nada más, “en ese reino del sueño”: quiero que
Solo en mí reconozcas tu ciudadano.
¿Antes quién quiso ojos, hacer el amor, así?
Yo quiero ahora. De todos modos estamos motivados y ocultos,
Qué estado sostenemos que todos los otros estados condenan,
Nos vemos a nosotros mismos, miramos el brillo solemne
De tribunales vacíos donde nos besamos… ¡Abiertamente!
Lo haces, lo haces, y yo los observo.
***
36
Keep your eyes open when you kiss: do: when
You kiss. All silly time else, close them to;
Unsleeping, I implore you (dear) pursue
In darkness me, as I do you again
Instantly we part… only me both then
And when your fingers fall, let there be two
Only, ‘in that dream-kingdom’: I would have you
Me alone recognize your citizen.
Before who wanted eyes, making love, so?
I do now. However we are driven and hide,
What state we keep all other states condemn,
We see ourselves, we watch the solemn glow
Of empty courts we kiss in… Open wide!
You do, you do, and I look into them.
Berryman´s Sonnets (1967)
71
Nuestra mañana de Domingo cuando sacerdotes del alba aplicaban
Hostia y vino a la herida humana, nos acostábamos
A nosotros mismos para curarnos: Temo que
Nuestra sabanilla quería, pero los amigos de Francis gritaban
En la nave de pinos, satisfechos al sol, y volaban
Sutiles como ángeles sobre la barricada
De ramas hecha sobre nosotros, hundidos en una cama medio hecha
De agujas suaves, medio de mar de nuestras muertes simultáneas.
“La muerte es la madre de la belleza”. Malogrados sin hoja
Estremecidos de placer, morimos para estar bien…
Descuidados con un amor soñoliento, tanto tiempo sin amor.
¿Qué si nuestra convalecencia debe ser engendrada
Como nosotros, la madrugada encuentra el toque de difuntos?…
Sobre nuestros pinos nuestra hermana, viento, se mueve.
***
71
Our Sunday morning when dawn-priests were applying
Wafer and wine to the human wound, we laid
Ourselves to cure ourselves down: I’m afraid
Our vestments wanted, but Francis’ friends were crying
In the nave of pines, sun-satisfied, and flying
Subtle as angels about the barricade
Boughs made over us, deep in a bed half made
Needle-soft, half the sea of our simultaneous dying.
‘Death is the mother of beauty.’ Awry no leaf
Shivering with delight, we die to be well…
Careless with sleepy love, so long unloving.
What if our convalescence must be breed
As we are, the matin meet the passing bell?…
About our pines our sister, wind, is moving.
Berryman´s Sonnets (1967)
Noticia Biográfica
John Berryman nació el 25 de octubre de 1914 en McAlester, en el estado de Oklahoma y se suicidó el 7 de enero de 1972 arrojándose de un puente en Missisipi. Es una de las mayores figuras de la poesía estadounidense de la segunda mitad del siglo XX. Junto a Robert Lowell, Sylvia Plath, Anne Sexton y W. D. Snodgrass, es considerado un poeta de la denominada poesía confesional, término acuado por el crítico M. L. Rosenthal. Berryman publicó su primera obra, titulada Poems, en 1942 durante la Segunda Guerra Mundial y una segunda, Dispossessed, seis años más tarde. La primera obra considerada como una de sus más importantes fue Homage to Mistress Bradstreet, aparecida en 1956. En cuanto al público y la crítica, fueron sus Dream Songs ,que aparecieron en serie desde 1964, las que mayor acogida obtuvieron. El primer volumen de esta serie, titulada 77 Dream Songs, le permitió ganar el Premio Pulitzer de poesía, siendo esta la máxima distinción que puede recibir un profesional de la prensa en Estados Unidos. El segundo volumen apareció en 1968, titulado His Toy, His Dream, His Rest. Un año más tarde, los dos volúmenes fueron publicados en un sólo libro, The Dream Songs.